En este momento tan feliz de mi vida quiero romper, una vez más, con una falsa creencia de que embarazo y gatos son incompatibles. ¿Me ayudas a difundirlo?
Como momento especial, me gusta compartirlo con quienes más quiero y mejor me hacen sentir. Es decir, con mi familia, mi pareja, mis amigos y, como no, mis hijos gatunos: Kato y Conxa.
Me encantaría que en esta etapa de mi vida no tuviera que dar explicaciones, pero me he encontrado con diversos episodios durante el embarazo en el que he tenido que responder a: “¿Y qué pasa con tus gatos?”
Por suerte cada vez son menos las personas que se echan las manos a la cabeza cuando hablas de vivir con gatos durante tu embarazo, pero haberlas, las hay. Por lo que he considerado conveniente volver a escribir sobre ello, esta vez desde mi propia experiencia y desde mi plena consciencia como futura madre.
Pero básicamente la conclusión es que NO es peligroso, o es bastante improbable que se produzca el contagio, y que con ser precavida ya se anula cualquier tipo de posibilidad de contagio.
Y eso ocurre porque:
Por lo tanto, además de no comer carne cruda y limpiar bien la verdura (que eso no tiene nada que ver con los gatos, pero es el principal método de contagio de la toxoplasmosis), se pueden tomar precauciones como lavarse bien las manos y a menudo, y que sea tu pareja u otra persona quién cambie el arenero (y hacerlo a menudo, también).
Una confesión: ¡¡¡¡estoy encantada de tener la excusa perfecta para que sea mi marido quién limpie el arenero!!!!! No me lo podía haber montado mejor jeje
La mayoría de la gente que me conoce sabe de mi pasión por los mininos, con lo cual ha habido varias veces una reacción directa de: Estás embarazada → ¡¿qué pasa con tus gatos?!
Obviamente mi respuesta siempre ha sido que los gatos se quedan en casa, y he intentado explicar que la gran mayoría de embarazadas que contraen toxoplasmosis lo hacen por haber comido carne cruda y/o verdura mal lavada.
Aunque la gente se fiaba de mis argumentos (o eso parecía) muchos me contaban que “tal conocida” o “tal familiar” había dado sus gatos a “no sé quién”, o los había dejado momentáneamente en casa de “no sé qué familiar o amigo”. Pobres mininos. Pocos de los interlocutores confesaban que este traspaso de gato en realidad había sido un abandono, que aún es más triste.
Pero posiblemente una de las situaciones que más me incomodó fue una que viví con el que había sido mi ginecólogo durante los últimos años. Mi ginecólogo de confianza… hasta entonces.
Si no he escrito esta opinión antes es porque tengo que empezar diciendo que, durante los años que el doctor Francisco Salamero Prat ha sido mi ginecólogo ha tenido un trato más que aceptable conmigo. Además, venía referenciado y todas mis amigas estaban contentas con él.
La cantidad de diplomas de su consulta, de gente que se visita con él y su trato afable (los días que está de buenas) reforzaban la buena imagen que tenía de él. Y cuando sospeché estar embarazada, fui a su consulta en el instituto Ginex de la Clínica Corachan de Barcelona.
Las dos primeras visitas sin incidentes. De hecho, nunca mencioné que tenía gatos porque no lo veía importante, ya sabía cuál eran las precauciones a tomar y no salió el tema. Ahora bien, a la tercera visita se desencadenó la hecatombe.
La cosa no empezó por los gatos, ese día el doctor Salamero estaba de mal humor, se le notaba y desconozco el motivo. Con lo cual todo fueron críticas desde el minuto uno, con un tono nada agradable para una recién embarazada acompañada de su hermana y su madre (que, por cierto, se sumó al histerismo del doctor). Las acusaciones recibidas fueron de todo tipo, pero el desenlace final ya pudo conmigo.
Cuando ya se había terminado la consulta, la cual intenté llevar con deportividad y buen rollo (no me apetecía entrar en esa espiral de mala leche en la que doctor estaba metido, bastante tenía yo con mis hormonas) recordé que quería preguntarle por los cambios que había visto que mis pechos habían sufrido. Justo tenía un arañazo en uno de ellos, porque un día tenía a Conxa encima de mí y, con lo asustadiza que es, escuchó un ruido raro y saltó con zarpazo incluido. Eso no es lo que le quería enseñar, pero el arañazo estaba ahí, con lo cuál la conversación fue más o menos así:
Lo primero, él ni sabía que yo tenía gatos, y ¿qué significa eso de “los gatos, lejos”?
La escena fue aún más dantesca, porque mi madre sabe el amor desmedido que tengo a mis gatos y se pensaba que yo era capaz de poner en peligro a mi bebé solo por proteger a mis gatos. Es normal, ella no tiene porqué saber qué ocurre con los gatos, pero el ginecólogo sí. Y, en cualquier caso, no enfrentar la situación de ese modo tan irrespetuoso.
A raíz de este horrible episodio, cambié de ginecólogo (ahora me atiendo por Doctora Anna Suy de iDona), y antes fui a ver otros médicos para escoger. En ningún caso encontraron que tener gatos fuera un problema. Lo mismo con las veterinarias que hablé, que han pasado sus embarazos trabajando con múltiples gatos, etc.
Por suerte, no todos los médicos son como el Dr. Salamero (el cual debe estar sembrado últimamente, porque las personas que conozco que se atendían con él han dejado de ir a su consulta, y no por lo que me ocurrió a mí, sino por otros episodios desagradables que ocurren cuando este señor decide enrabiarse con sus pacientes para desahogarse). En cualquier caso, que esa sea su forma de tratar a la gente no me importa demasiado, lo que realmente me fastidió es si ha habido más mujeres que han pasado por esto, y se han deshecho de sus gatos por culpa de un mal consejo de alguien que se supone que «sabe» lo que dice y tiene el suficiente tacto para exponer pros y contras de la situación.
Sí, vivo con gatos, y creo que es lo mejor que he hecho en mi vida y que mi hija lo va a disfrutar y vivir tan bien como lo hacemos nosotros, sus padres. Porque es muy beneficioso para los bebés.
Y estoy segura que también lo será cuando la nena sea más grande, ya os iré contando el progreso.
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Hola! Os agradezco todos vuestros comentarios.
Yo tengo una gatita en casa y convivimos perfectamente con ella.
Ahora estoy embarazada de 11 semanas y ayer un gato callejero se metió en mi coche, cuando nos vio se fue corriendo pero me quede muy preocupada porque luego tuve que conducir y entrar en el coche y me asusté mucho por si hubiese riesgo de contagio por el echo de que el gatito haya estado dentro del coche. Nunca he tenido miedo pero también di con un ginecólogo que ya cambie por cierto que me metió mucho miedo 😞 y ahora estoy asustada por eso. Ojalá alguien me ayude.
Hola estoy embarazada y tengo 2 gatitos y uno de ellos siempre me amasa la tripa y quería saber si eso tiene algo perjudicial para el feto, ahora mismo tengo un hematoma intrauterino y no le dejó, pero quiero saber si cuando se re absorba puede volver a amasarmr la tripa.
Gracias.
Un saludo.
Cómo lo llevaste? Yo recién me acabo de enterar de mi hematoma y tengo algo de miedo, el gato no se separa de mi y a veces girando me pisa la tripa. ¿Cuál es tu experiencia?? Gracias!!!!
Hola Paty, enhorabuena por el embarazo. Desconozco si con el hematoma es bueno o no, pero eso sería un caso a consultar con tu gine. Si no existiera tal situación, no hay ningún problema en que te amase. Es más, es precioso que lo hago :) Un abrazo
Hola .me encanto tu historia .y me das un alivio por que yo tengo dos hermosos gatos que son mi vida ..pero ya estoy embarazada ..y tengo muchas dudas en el momento de que nadca el bebe ..como hiciste tu cuando el bebe era recien nacido..y tu sabes que los gatos le encantan estar encima de uno entonces me afana un poco los pelos..tu como hiciste porfavor cuentame muchas graciaassssss
Hola Julieth; ¿ya has tenido al bebé? Me alegro que llegaras a leer el artículo, es muy importante estar bien informada. El tema de los pelos es muy personal, es verdad que cuando tienes un bebé creo que los ves más. Tanto el papá como yo nunca hemos sido muy obsesivos con el tema pelos, pero al tener a la nena y ver que se los llevaba a la boca de bebé, o que estaban por toda su ropa... Nosotros personalmente lo fuimos asimilando, tratanto de limpiar más. Pero si quieres que no haya ni un pelo, tienes que limpiar mucho, ayudándote tal vez de robots, aspiradores, etc. para hacerlo más sencillo. Un abrazo
La toxoplasmosis se contrae en mayoria de casos por carne cruda y por vegetales mal lavados, también por la tierra de las plantas, como has explicado. Aun no he escuchado a ningun ginecologo que te recomiende que no convivas con verduras que te puedes infectar... Yo quiero contaros que he sido voluntaria en una asociación de gatos de mi ciudad, he tratado con todo tipo de gatos, tanto adultos como cachorros, he acogido en casa a muchos de ellos y finalmente tengo a dos gatitas conmigo que son parte de mi familia. He tratado con gatos enfermos y gatos de la calle y soy negativa en toxoplasmosis. No quiero decir que no puedas infectarte y que no debas tener precaución, porque yo si la tengo, desde que estoy embarazada no cambio la arena de mis gatas, no estoy acogiendo gatitos y cuando estoy con animales que no son mios me lavo las manos, igual que lavo las verduras, congelo los embutidos y me como la carne muy hecha! Creo que se ha exagerado demasiado y se han creado falsos mitos entorno al gato cuando el porcentaje de adquirir la enfermedad, por culpa de ellos, es minimo. Puedes convivir perfectamente con todos los animales, creo que sería mucho peor para tu bebe y para ti deshacerse del gatito, o cualquier animal, al que quieres y tener que sufrir una pérdida en cualquier momento del embarazo. Felicidades por el articulo y todas sus respuestas, me alegra ver gente como vosotr@s!
Gracias a ti Tamara, y felicidades por el embarazo (otro/a minicatlover en camino siempre es una alegría). Tienes toda la razón del mundo, han demonizado al gato (como lleva ocurriendo a lo largo de la historia), cuando en realidad la gran causa de la toxoplasmosis ni siquiera es él. Esperemos que poco a poco vaya difundiéndose esta información vs el mito dañino. Un abrazo :)
La gente y la mania con los gatos. Tengo dos niñas y tres gatos. El ginecólogo lo único que me dijo fue que no cambiará yo la tierra( cosa que por unos meses agradezco....jaja y me aprovecho) pero mis gatos no salen Asique difícil que puedan contagiarme nada y mi veterinario me dijo que para haber riesgo debía como mi importante meterme las manos en la boca tras cambiar la tierra .....! Al nacer las niñas tuve que aguantar comentarios de cuidado que son muy celosos y se van a ir a los ojos del bebé...
Ni caso! En los embarazos hay mil riesgos de que pasen cosas: gripes, varicelas, toxo por comida, lysteria también por comida, caídas..... Si nos ponemos en ese plan....
Un saludo!!
Gracias por tu testimonio Lau, un abrazo
Muchas gracias por lo que has contado, hace más de un año que tengo gatos, hace un par de meses quedé embarazada y fue la locura con los gatos, mi mamá me obligaba a deshacerme de ellos (Mi gata había tenido cachorritos) salió una adoptante para uno de ellos y me quedé con 2 nenes y mi gatita, mi mamá aún insistía en que me deshaciera de ellos, pero no lo hice, ellos están en mi casa conmigo y mi esposo, pero aún sigo leyendo qué cuidados y precauciones tomar.
Un abrazo Arisai!
Hola me encanto tu publicación. Quisira saber si tu dormias o duermes con tus gatos? Ya que estoy planeando quedar embarazada y mi gato duerme conmigo es muy pegado a mi. Siempre tengo cuidado pero a veces en las noches se estira y pega sus patitas en mi boca. Hay alguna posibilidad de contagiarme?? El sale al patio a veces y su arena la cambia mi esposo
Hola Analia, gracias por tu mensaje. Sí, dormía con mis gatos y lo sigo haciendo (ahora dormimos mi marido, la niña de 2 años y yo, y los gatos van entrando y saliendo a su antojo). En invierno con el frío se agradece más aún :) Si sigues los consejos que pongo en el post, no tienes que preocuparte de nada. Suerte en la búsqueda del bebé <3
Yo tengo alergia a los gatos. Me dan estornudos, se me inflaman e irritan los ojos y me producen picores en la garganta. No voy a hablar de cuando tengo algún arañazo como se me pone la piel alrededor.
Mi novio tiene una gata. No puedo adorarla más. La adoptó con tres meses, dos días después de quien yo sufriera un accidente de coche. Os juro que no hubiera llevado tan bien la recuperación sin ella.
No vivimos juntos todavía, pero paso temporadas en su casa, y ciertamente es el primer animal con el que convivo. Si, a veces tengo que ventilar de más la habitación, tomarme más pastillas y lavarme infinitamente más veces las manos y la cara, pero jamas se me ocurriría pedirle a mi novio que se deshaga de Leia cuando definitivamente vivamos juntos. De verdad me pillo desprevenida poder querer tanto a un animal. Sobretodo cuando no es correspondido, porque obviamente la gata no me soporta. Imaginaros que cada x tiempo aparece una tía en vuestra casa que intenta abrazaros y achucharos cuando os cruzáis por delante. No, no la culpo, ella demuestra mucha paciencia con mi lento aprendizaje de tener gatos.
Lo que quiero decir, es que en el momento que adoptes, es para siempre. Surja lo que surja.
Menudo tristón, por esto Leia me odia. Por plasta.
Muchas gracias por el blog, ayuda mogollón a las primerizas como yo!!!
No puedo estar más a favor de todo lo que dices, ojalá hubiera más gente como tú. Un abrazo <3
Después de leer tu post y todos los comentarios veo que no hay nadie que piense lo contrario a ti. Para mi el tema de mascotas en general y bebés es delicado. En mi caso aunque no me gusta tener mascotas en casa si que no sería capaz de abandonar a un animal porque ya no m interesaea tenerlo en casa. Y por otro lado cuando mi hijo era bebé me vi en una situación un tanto desagradable con un gato doméstico. Me imagino que todo depende del carácter del animal y por supuesto de que tomes todas las precauciones que debas. Felicidades por tu embarazo. Besos!!
Gracias Karina, lamentablemente sí hay mucha gente en contra de mis palabras lo que seguramente no se manifiestan en este blog (cuyos seguidores son mayormente amantes de los gatos, sino es raro que vengan a consultarlo...). Digo "lamentablemente" porque el problema no está en si quieres o no vivir con animales, si te gusta convivir o no con gatos... Eso es respetable, como en tu caso, que comentas que prefieres no vivir con animales pero que serías incapaz de abandonar a uno. Algo lógico y sensato. El problema reside en la desinformación, especialmente por parte de los profesionales, con algo tan delicado como la maternidad y como el cuidado de animales domésticos. Gracias por tu mensaje. Un abrazo
Me ha gustado mucho tu artículo, todavía no soy madre pero tengo a dos grandes compañeras Zet y Munt perra y gata y nunca nunca, nunca, se me ocurriría dar a mi gata por quedarme embarazada. He oído más de una vez esto de los gatos, de la taxoplasmosis pero también sé qué es muy poco probable el contagio y más si tomas las precauciones adecuadas - como tú has dicho la escusa perfecta para que limpie el arenero mi marido, jajajjaa- en fin; antes de deshacerse de tu compañero fiel sobre todo leer mucho y saber exactamente todo lo que puedes hacer para no llegar a esta acción. Así que conclusión, si me quedo embarazada mi gata se queda en casa, faltaría más y si me toca un dr Salamero, o paso de él o me cambio. Ah y muchas felicidades por tu embarazo!!!!!!
¡Genial Aida! MUchas gracias por tu mensaje :) Un abrazo